miércoles, 16 de noviembre de 2011

Parte 17



Su cuerpo llacia en mis brazos, laxo y frío.
Había tocado las negras aguas, el impacto había sido fuerte.
Su larga melena empapada,la mecía el viento, su  bello rostro estaba sereno.
Sobrevolando el cielo, abrazándola fuerte, cubriéndola del frío, intentando infundirla calor con mi cuerpo, rogué por primera vez.
-No te puedes ir, quedate.............junto a mí.