viernes, 17 de junio de 2011

Parte 2

Solo podía ver el perfil de su rostro, vestía con ropa oscura  y de su espalda sobresalían unas alas irreales.
Estaba paralizada, aterrorizada, pero espectante.
Con una velocidad sobrehumana, desapareció de la barandilla y apareció a mi lado, su rostro justo frente al mío, me hizo contener el aire en mis pulmones.
Sus ojos de un verde demasiado vivido para ser reales, me observaban detenidamente.
Yo conseguí inhalar un poco de aire, aunque no el suficiente.
Conseguí desprender mi vista de sus ojos fríos y letales.
Y  lentamente recorrí sus facciones, dura mente masculino, atractivo, peligroso, pero podría decir que era bello.
Aunque me acechaba como un depredador, ya no sentía el mismo miedo.
Lo que tarde en parpadear, desapareció de mi vista.
En un segundo, pensé que había sido producto de mi imaginación, pero un segundo despues sentí como un escalofrío recorría mi columna, y percibí su respiración cerca de mi cuello.
-No debiste dejar de tener miedo.